US ‘Night Stalkers’ en el Caribe: tensión en Venezuela
En medio de las crecientes tensiones por un posible cambio de régimen en Venezuela, se han avistado en el Caribe los «Noctámbulos» estadounidenses, un grupo de pilotos de helicópteros de la 160ª Región de Operaciones Especiales del Ejército de los Estados Unidos. Conocidos por sus misiones peligrosas, han participado en operaciones como la batalla contra el Estado Islámico en Irak y Siria, y la captura del líder de Al-Qaeda, Osama bin Laden. Además, su lema «La muerte espera en la oscuridad» refleja su trabajo letal nocturno. Por lo tanto, su presencia en la región ha generado preocupación sobre un posible involucramiento estadounidense en la crisis venezolana.
Según Steven Hartov, autor de un libro sobre las misiones secretas de la unidad, los Night Stalkers son «los mejores pilotos de rotor en el mundo». Su presencia en el Caribe, donde han sido avistados sus helicópteros Little Bird y Black Hawk, se suma a la creciente presión ejercida por Donald Trump sobre el presidente venezolano Nicolás Maduro. La presencia militar en la región se intensifica con la llegada de bombarderos B-52 y aviones de combate F-35, lo que genera inquietud sobre un posible involucramiento estadounidense en la crisis venezolana.
Helicópteros estadounidenses en misiones secretas en el Caribe
En medio de la escalada de tensión en Venezuela, el presidente Donald Trump ha confirmado públicamente la autorización de operaciones de inteligencia CIA en el país, lo que ha generado preocupación sobre un posible involucramiento militar estadounidense. Además, los ataques con misiles estadounidenses contra supuestas embarcaciones de drogas en el Caribe han dejado al menos 27 muertos desde septiembre. Expertos como Eva Golinger advierten que la probabilidad de acciones militares estadounidenses en Venezuela es alta, lo que podría llevar a una intervención selectiva o incluso una incursión en territorio venezolano.
Robert Evan Ellis, experto en América Latina y asesor de Mike Pompeo durante el primer mandato de Trump, describe la presencia de los «Noctámbulos» en el Caribe como una parte de una «mensajería militar cuidadosamente calibrada» destinada a aumentar la presión sobre el régimen de Maduro. Por lo tanto, se especula que la presencia de estas unidades militares podría ser parte de una negociación controlada diseñada para avanzar los intereses estadounidenses. Ellis ve tres posibles resultados: la presión podría convencer a los jefes militares venezolanos de derrocar a Maduro y resolver el problema sin intervención estadounidense; o bien, el régimen de Maduro podría ser decapitado por una operación estadounidense importante, abriendo el camino a una transición democrática.
Tensión en el Caribe, un paso hacia la negociación controlada
Robert Evan Ellis, experto en América Latina, sugiere que la presencia de los «Noctámbulos» en el Caribe podría ser parte de una negociación controlada para avanzar los intereses estadounidenses en Venezuela. Además, Ellis anticipa tres posibles resultados: la presión podría llevar a la derroca de Maduro sin intervención estadounidense, o bien, el régimen podría ser decapitado por una operación estadounidense, abriendo el camino a una transición democrática. Por lo tanto, se especula que la presencia de estas unidades militares podría ser un paso hacia una posible intervención estadounidense en la crisis venezolana.
Los Night Stalkers han demostrado su capacidad para realizar misiones audaces en el pasado, como la invasión de Granada en 1983 y la caída de Manuel Noriega en Panamá en 1989. Su habilidad para transportar y extraer fuerzas especiales en lugares imposibles, especialmente de noche, ha sido clave en operaciones como la rescate de un ciudadano estadounidense en una prisión de Panamá bajo fuego intenso. «Son los únicos que pueden entregar y extraer a las fuerzas especiales en lugares imposibles», afirma Hartov. Su experiencia en misiones delicadas sugiere que su presencia en el Caribe podría estar relacionada con una estrategia más amplia para influir en la situación en Venezuela.
Operaciones nocturnas en el Caribe
Las misiones de los Night Stalkers no siempre han tenido un final feliz. Según Steven Hartov, muchos miembros de la unidad han perdido la vida o han resultado gravemente heridos en accidentes de entrenamiento. Además, operaciones como la Batalla de Mogadishu en 1993 han resultado en tragedias, como la pérdida de cinco miembros en combate. En consecuencia, la unidad ha aprendido a valorar la vida humana y a adoptar una estrategia más cautelosa en sus misiones. Por lo tanto, su presencia en el Caribe suscita preocupación sobre su posible involucramiento en la crisis venezolana.
Andrés Izarra, ex ministro de Chávez ahora en exilio, advierte sobre un posible desastre somalí si Estados Unidos ataca Caracas, la capital venezolana. «Un hombre con un AK-47 y una camiseta puede derribar tu helicóptero», sostiene Izarra, refiriéndose a la capacidad de los milicianos venezolanos para enfrentar a las fuerzas especiales estadounidenses. Además, Izarra destaca la presencia de 30.000 guardias praetorianos, incluyendo agencias de inteligencia y policías especiales, que podrían enfrentar a las unidades estadounidenses. Por lo tanto, la presencia de los Night Stalkers en el Caribe suscita preocupación sobre la capacidad de Estados Unidos para operar en Venezuela.
Maduro cuenta con fuerzas armadas para repeler un ataque estadounidense
La amenaza de un ataque estadounidense ha espantado a los gobiernos regionales, incluido el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, que advirtió contra la interferencia externa en un «continente libre de armas de destrucción masiva». Lula destacó que «la intervención extranjera puede causar más daño de lo que busca prevenir». Mientras tanto, el embajador de Venezuela ante la ONU, Samuel Moncada, afirmó que Washington se dirige hacia «una catástrofe que puede destruir la región por generaciones». Moncada aseguró que «están viniendo para una invasión… para quitarle nuestro país y convertirnos en una colonia», mencionando la presencia de helicópteros estadounidenses cerca de Trinidad.
Algunos cuestionan que Trump siga adelante con sus maniobras militares, considerándolas una amenaza vacía para intimidar a Maduro o a sus jefes militares. Hartov también expresó escepticismo sobre una posible operación de «sorpresa» masiva contra Maduro o sus ministros. Sin embargo, Washington ha demostrado su capacidad para llevar a cabo operaciones similares en el pasado, como la captura de Manuel Noriega en Panamá, en la que los Night Stalkers jugaron un papel clave. Por lo tanto, la presencia de estos pilotos de helicópteros en el Caribe suscita preocupación sobre su posible involucramiento en la crisis venezolana.
Tensiones con Venezuela, un escenario de guerra


