La economía del Reino Unido se contrajo inesperadamente

La economía del Reino Unido experimentó una contracción inesperada del 0,1% en octubre, revirtiendo las previsiones de un ligero crecimiento. Este retroceso, que sigue a una caída similar en septiembre, se atribuye principalmente a la cautela de los consumidores y las empresas ante el inminente presupuesto del gobierno y las dificultades en el sector manufacturero. La Oficina Nacional de Estadísticas (ONS) reveló que la debilidad en el sector servicios, especialmente en ventas minoristas y automotrices, fue un factor clave. Este escenario consolida las expectativas de una inminente bajada de tipos de interés por parte del Banco de Inglaterra.

Debilidad del consumo y la manufactura

El producto interno bruto (PIB) británico disminuyó un 0,1% en octubre, según datos de la ONS. Esta cifra contrasta con las expectativas de los economistas, que anticipaban un aumento del 0,1%. La caída se produce tras un mes de septiembre que también registró un retroceso del 0,1%. La debilidad generalizada se observa en el sector servicios, que experimentó una contracción del 0,3%. Dentro de este sector, las ventas de automóviles y el gasto minorista mostraron una marcada debilidad, junto con una disminución en las actividades de consultoría y programación informática.

El sector manufacturero, aunque mostró un aumento del 1,1% impulsado por la recuperación parcial de un ciberataque a Jaguar Land Rover, no logró compensar las pérdidas generales. La producción de la construcción también se vio afectada, cayendo un 0,6%. Las empresas de los tres sectores principales informaron a la ONS que esperaban los resultados del presupuesto, lo que sugiere una paralización en la toma de decisiones de inversión y gasto.

Perspectivas de tipos de interés y desempleo

Tras cuatro meses consecutivos sin crecimiento, los analistas financieros prevén que el Banco de Inglaterra anunciará una reducción de los tipos de interés en su próxima reunión del 18 de diciembre. Se espera una bajada de un cuarto de punto porcentual, situando el tipo de referencia en el 3,75%. Esta medida se fundamenta en la disminución de las presiones inflacionarias, las débiles perspectivas económicas y el creciente desempleo. La contracción económica, más pronunciada de lo anticipado, facilitará que la inflación descienda más rápidamente.

La cautela observada en hogares y empresas antes del anuncio del presupuesto, que incluye posibles aumentos de impuestos, ha generado un «efecto paralizante» en la economía. Sectores como la manufactura, la construcción, la distribución mayorista, la programación informática, el sector inmobiliario y las agencias de empleo han sentido el impacto de esta incertidumbre. La falta de impulso económico podría agravar la situación del mercado laboral en los próximos meses.

El panorama económico del Reino Unido presenta un desafío significativo, con una contracción inesperada que subraya la fragilidad del crecimiento. La anticipada bajada de tipos de interés por parte del Banco de Inglaterra busca mitigar los efectos negativos, pero la cautela empresarial y el gasto limitado de los consumidores sugieren un periodo de ajuste prolongado. Las próximas semanas serán cruciales para evaluar la efectividad de las medidas gubernamentales y la respuesta de la economía.