Irán admite falsedad sobre derribo de F-35

La Corporación de Radiodifusión Iraní ha admitido públicamente haber difundido información falsa sobre el derribo de dos aviones de combate israelíes F-35 durante el conflicto de 12 días en junio. El director de la entidad, Peyman Jabali, reconoció que la noticia se basó en información no verificada proveniente de un oficial militar. Esta admisión surge tras el escepticismo generalizado, dado que no existían confirmaciones previas de tales derribos en conflictos armados. El incidente ha generado preocupación sobre la credibilidad de los medios estatales iraníes y la importancia de verificar las fuentes antes de publicar.Peyman Jabali, al frente de la Corporación de Radiodifusión Iraní, declaró en un discurso en la Universidad Beheshti de Teherán que su organización cometió un «error profesional» al transmitir informes incorrectos. Según el sitio web iraní Eqtesad, Jabali explicó que la información se recibió «tal cual era», pero posteriormente se demostró que no era precisa. La fuente original de la noticia fue un oficial militar que aseguró la veracidad del incidente, lo que llevó a su difusión sin la debida confirmación oficial.
Jabali subrayó que este tipo de errores dañan la reputación de la emisora y enfatizó la necesidad de que las organizaciones de medios se basen únicamente en declaraciones oficiales claras y verificadas. Criticó además lo que denominó una «retórica de debilidad» interna en Irán, sugiriendo que esta pudo haber contribuido a evaluaciones inexactas por parte de Israel durante la confrontación. La rápida publicación de información no confirmada, especialmente sobre bajas militares, fue señalada como perjudicial.

Contexto del conflicto y advertencias

El enfrentamiento de 12 días, iniciado el 13 de junio, comenzó con una operación aérea israelí a gran escala denominada «Operación León en Ascenso». El objetivo declarado eran sitios militares e infraestructuras que, según Israel, albergaban a líderes militares y científicos nucleares iraníes. Teherán respondió esa misma noche con la «Operación Promesa Honesta 3», lanzando misiles balísticos y drones hacia Israel. El conflicto resultó en la muerte de comandantes de la Guardia Revolucionaria y daños a instalaciones sensibles en Irán, mientras que ciudades israelíes sufrieron impactos por cientos de proyectiles iraníes.
La intervención de Estados Unidos el 22 de junio añadió una nueva dimensión al conflicto. Las declaraciones de Jabali sirven como una advertencia sobre la importancia de la precisión informativa en contextos de alta tensión. La dependencia de fuentes no oficiales puede llevar a la propagación de desinformación, afectando la percepción pública y la credibilidad de los medios. La necesidad de rigor periodístico se vuelve crucial para evitar malentendidos y escalar innecesariamente las tensiones internacionales.
La admisión de Irán sobre la falsedad de sus afirmaciones acerca del derribo de F-35 subraya la fragilidad de la información en tiempos de conflicto. Este incidente resalta la importancia de la verificación rigurosa y la dependencia de fuentes oficiales para mantener la credibilidad. La situación pone de manifiesto los desafíos que enfrentan los medios para navegar en un panorama informativo complejo y a menudo polarizado, donde la desinformación puede tener consecuencias significativas.