Hombre culpable de incendio mortal en Bradford

Un jurado ha declarado culpable de asesinato a Sharaz Ali, de 40 años, por un incendio provocado en una vivienda de Bradford que causó la muerte de una mujer y sus tres hijos. El suceso, ocurrido a las 2 de la madrugada del 21 de agosto del año pasado, se debió a motivos de celos, exacerbados por el consumo de drogas y alcohol.

Motivación y desarrollo del ataque

La fiscalía argumentó que Ali buscaba «vengarse» tras el fin de una relación de siete años, calificada de «abusiva», con su expareja Antonia Gawith. Ali también fue declarado culpable de intento de asesinato contra Gawith. La víctima se encontraba alojada en casa de su hermana, Bryonie Gawith, quien junto a sus hijos Denisty, de nueve años, Oscar, de cinco, y Aubree, de 22 meses, quedaron atrapados en el interior y fallecieron a causa del fuego.

El tribunal de la Corona de Doncaster escuchó que el acusado pretendía «infligir el máximo dolor» con el incendio, sin importar quién se encontrara en la casa, aunque se determinó que debía ser consciente de la presencia de los niños. Las dos hermanas residían juntas en la vivienda tras separarse de sus respectivas parejas.

Declaraciones y contexto de la relación

En una declaración grabada, Antonia Gawith describió a Ali como una persona controladora y violenta. Explicó que su hermana era su único apoyo tras distanciarse de amigos. «Le tenía mucho miedo», afirmó, detallando las promesas incumplidas de Ali sobre dejar el alcohol y las drogas, y su regreso frecuente bajo sus efectos.

Fue durante unas vacaciones semanas antes del suceso cuando Bryonie Gawith brindó a Antonia la fuerza necesaria para finalizar la relación. El tribunal tuvo conocimiento de que Ali culpaba a Bryonie de la ruptura, enviando mensajes amenazantes a Antonia como: «Sé quién ha causado esto en mi vida… Mejor empieza a orar porque ahora voy a involucrarme en su vida y todos lo van a sentir».

Desarrollo de la noche del incendio

La noche del ataque, Antonia Gawith regresó a casa tras su turno en Tesco. Al escuchar un ruido, descendió y observó a Ali forzando la entrada, rociando gasolina en el interior, sobre ella y sobre sí mismo. Gawith logró huir, asumiendo que Ali la seguiría, pero este permaneció dentro y provocó el incendio con un mechero.

Antonia Gawith relató sus desesperados intentos por regresar a la vivienda por la puerta trasera, gritando en busca de ayuda para su hermana y sobrinos. La llegada de agentes policiales permitió romper la puerta y extraer a los ocupantes.